El Vaticano, mediante el Dicasterio para la Doctrina de la Fe, ha rechazado las supuestas apariciones de la vidente Gisella Cardia en Trevignano, Roma, al no encontrar elementos sobrenaturales. La Santa Sede validó la prohibición del obispo de Civita Castellana sobre celebraciones en ese lugar y subrayó que las visiones y mensajes de Cardia, quien tiene antecedentes penales por bancarrota y es investigada por presuntas estafas, no son auténticos. A pesar de esto, Cardia continúa atrayendo a fieles y publicando mensajes de la Virgen en Internet, solicitando donaciones.
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