El Tribunal Supremo de Estados Unidos ha fallado a favor de la Administración de Donald Trump al permitir la eliminación del Estatus de Protección Temporal (TPS) para 350,000 venezolanos. Esta decisión responde a una solicitud de emergencia del Gobierno, que busca revocar la protección humanitaria otorgada previamente por la Administración de Joe Biden ante el peligro que representaba el régimen de Nicolás Maduro. La resolución del tribunal sólo contó con la disidencia de la jueza liberal Ketanji Brown Jackson y anula la decisión de un juez federal de San Francisco que había mantenido vigente el TPS para los migrantes venezolanos.
El TPS permite a los beneficiarios residir y trabajar legalmente en EE.UU. debido a situaciones inseguras en sus países de origen. Sin la extensión proporcionada por Biden, estas protecciones finalizarán para algunos inmigrantes en abril y para otros en septiembre. La revocación del TPS fue una de las primeras medidas antiinmigración adoptadas por Trump tras su investidura. El Gobierno argumentó ante el tribunal que una extensión de 18 meses, aprobada por Biden, comprometería la seguridad nacional y pública de EE.UU., además de sobrecargar servicios locales ya saturados y llevar a comunidades a la quiebra.
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