La Agencia Tributaria sigue sumida en conflictos laborales a pesar de un reciente acuerdo que, según se anunciaba, pondría fin a dos años de tensiones internas. Pese a que el pacto contó con el respaldo de los sindicatos mayoritarios SIAT y UGT, el malestar persiste entre los miembros de GESTHA, el sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda.
El acuerdo obtenido, que a última hora fue respaldado también por CCOO, CSIF y CIG, fue presentado por UGT como un avance significativo, gracias a la mediación de Santiago Menéndez Menéndez y el impulso de Consuelo Sánchez García, actual directora de recursos humanos. Sin embargo, GESTHA optó por no firmar este nuevo entendimiento, recalcando su oposición a ciertas medidas, principalmente las relacionadas con la movilidad laboral entre provincias y el ‘problema’ de la Agència Tributària de Catalunya.
El centro del conflicto parece estar en la «reserva de provincia» para los agentes que promocionan a técnicos, una medida denunciada por GESTHA por su potencial impacto negativo en las oportunidades de los técnicos actuales. GESTHA sostiene que esta política ha provocado una escasez de movilidad para muchos de sus miembros, quienes ven limitadas sus opciones para cambiar de destino geográfico, especialmente en regiones como Catalunya.
La posibilidad de que un cambio en el sistema de financiación autonómica lleve a un traspaso de funcionarios a la Agència Tributària de Catalunya también aumenta la presión. Este escenario podría intensificar el deseo de muchos técnicos de abandonar la región, exacerbando la disputa sobre la movilidad laboral.
GESTHA ha respondido enérgicamente, citando a Churchill en sus comunicaciones internas para recalcar su descontento: «Ahora tendréis deshonor y guerra», declararon, anunciando la posibilidad de movilizaciones y acciones en diciembre si no se logra resolver la situación mediante negociaciones. Insisten en que los cambios acordados favorecen injustamente a quienes ascienden a técnicos de Hacienda, perjudicando a aquellos que ya ocupan esa función.
Mientras tanto, UGT y otros sindicatos defienden que la administración debe adoptar sus argumentos para no perder en la mesa de negociación. Además, señalan que deben revisarse otros elementos críticos no resueltos, como la progresión salarial y un nuevo convenio colectivo. Según Antonio García Soto de UGT y Manuel Porras de SIAT, estas discusiones son imprescindibles para restaurar un ambiente laboral más justo y mejorar la condición de todos los trabajadores dentro de la Agencia Tributaria.
Este panorama asegura que en las próximas semanas, la negociación será clave para tratar de reconciliar a las distintas facciones en una institución donde las discrepancias internas están lejos de resolverse completamente.
Fuente: Gestha