El panorama del mercado de alquiler en España continúa siendo un tema candente y desafiante en 2024, con los precios en constante aumento y las políticas fiscales para los propietarios en el centro del debate. Según los últimos datos de Idealista, el precio del alquiler ha experimentado un incremento interanual del 11,1% en noviembre, alcanzando los 13,3 euros por metro cuadrado de media en todo el país. Este aumento persiste a pesar de los diversos esfuerzos por parte de las autoridades para controlar la situación.
El mercado de alquiler enfrenta múltiples retos, siendo el más destacado la escasez de oferta. José Ramón Zurdo, CEO de la Agencia Negociadora del Alquiler (ANA), señala que las políticas intervencionistas han llevado a muchos propietarios a optar por alquileres de temporada o turísticos, dejando fuera del mercado las opciones de arrendamiento a largo plazo. Este fenómeno se ve exacerbado por una serie de tributos y limitaciones que ahora deben soportar los dueños de inmuebles, incluyendo los elevados gastos de agencia y restricciones para actualizar las rentas.
En un intento por equilibrar la balanza, la nueva normativa fiscal planeada para la declaración de la Renta de 2025 introduce ciertos cambios que buscan incentivar la oferta de viviendas en alquiler. Los Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha) han anunciado que los contratos celebrados a partir del 1 de enero de 2024 contarán con modificaciones en la reducción sobre el rendimiento neto positivo para los arrendatarios. La reducción puede llegar hasta un 90% en casos específicos, como para contratos nuevos en zonas de mercado residencial tensionado que impliquen una disminución de al menos un 5% en la renta con respecto al contrato anterior.
Los cambios fiscales también contemplan una reducción del 70% cuando se alquilen viviendas nuevas en áreas tensionadas a jóvenes entre 18 y 35 años, viviendas asequibles o protegidas, o en programas públicos que limiten la renta. Esta reducción será del 60% en viviendas rehabilitadas en los dos años previos a la firma del contrato, y del 50% en los demás casos. Para contratos anteriores al 2023, continuará aplicándose una reducción del 60%.
Actualmente, sólo Cataluña tiene declaradas zonas tensionadas, lo que podría limitar el impacto de estos incentivos fiscales. Resta por ver cómo evolucionarán estas medidas en el resto del país y si podrán aliviar el creciente problema del acceso a la vivienda de alquiler, un asunto de creciente importancia para muchos españoles.
Fuente: Gestha