Los vecinos del número 20 de la calle San Ildefonso han encabezado una protesta enérgica para denunciar una serie de problemas que afectan gravemente su calidad de vida. La manifestación, que reunió a decenas de personas, exigió acciones inmediatas por parte de las autoridades locales. Los lugareños argumentan que el deterioro de los servicios básicos y el incremento de la inseguridad han alcanzado niveles inaceptables, exacerbando las tensiones en la comunidad. Pancartas y consignas fueron la expresión del descontento generalizado, destacando un sentimiento de abandono por parte del ayuntamiento.
El epicentro del malestar comunitario se centra en la falta de mantenimiento de las infraestructuras y en la creciente sensación de inseguridad. Los residentes afirman que las calles muestran un deterioro significativo, lo que supone un peligro para transeúntes y vehículos. Además, denuncian un aumento en la actividad delictiva, lo que ha generado miedo e incertidumbre entre las familias del área. Las autoridades municipales han sido instadas a responder ante estas demandas, con la comunidad exigiendo soluciones concretas para garantizar un entorno seguro y digno.
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