En un duelo que evidenció las limitaciones actuales del Girona, el Sevilla se impuso con claridad en Montilivi con un marcador contundente de 0-2, cortesía de los goles de Alfonso González e Isaac Romero. El equipo dirigido por Matías Almeyda capitalizó los errores defensivos del Girona, aprovechando su velocidad en los contragolpes liderados por Vargas. A pesar de la precaria condición de sus plantillas, ambas escuadras están a la espera de nuevas incorporaciones en el mercado de fichajes, ajustándose a las restricciones salariales que complican su situación en la Liga.
El Girona, pese a mostrar cierta voluntad ofensiva, se mostró descoordinado y alternó posesiones ineficaces con pérdidas de balón que facilitaron las transiciones del Sevilla. La afición local, impaciente y envuelta en frustración, fue testigo de un equipo que sigue sin encontrar contundencia en las áreas, un problema que se agravó con las intervenciones del portero Nyland. Mientras el Sevilla lograba una victoria revitalizante tras dos derrotas ajustadas, el Girona se hunde en el último puesto del campeonato, incapaz de revertir una tendencia negativa que ya le ha costado 10 goles en contra en apenas dos jornadas.
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