La icónica canción «La Macarena», que ha atravesado generaciones desde su lanzamiento hace 32 años, sigue siendo un fenómeno cultural de corte global. Sus creadores, el dúo sevillano Los del Río, formado por Antonio Romero y Rafael Ruiz, recibieron recientemente el galardón de ‘Mejor Embajador de España’. Este prestigioso reconocimiento fue otorgado por la Academia de la Diplomacia del Reino de España en una emotiva ceremonia en el Hotel Alfonso XIII de Sevilla.
La canción, que se ha convertido en un himno inconfundible en todo tipo de celebraciones alrededor del mundo, ha servido como embajadora cultural de España, y específicamente de Andalucía y Sevilla, en la escena internacional. En su discurso de agradecimiento, Los del Río expresaron su felicidad y orgullo, señalando cómo «La Macarena» sigue siendo el clímax de sus conciertos, uniendo a multitudes en un baile compartido que culmina con alegría en cada actuación.
Durante la misma gala, el doctor Manuel de la Peña Alonso-Araujo, un cardiólogo de renombre mundial, fue homenajeado con el título de ‘Embajador de la Salud y de la Vida’. De la Peña, quien ha ganado reconocimiento por sus investigaciones sobre longevidad y por su descubrimiento del yacimiento de supercentenarios, destacó en su obra más reciente la importancia del baile y la música, mencionando específicamente a «La Macarena» como un ejemplo de terapia musical beneficiosa.
El evento, que se desarrolló con la presencia de importantes figuras del mundo diplomático, como el presidente de la Junta de Embajadores de la Academia, Rafael Fernández Pita, sirvió también para la designación de nuevos académicos y cónsules honorarios, reforzando el papel vital de la Academia en el ámbito de las relaciones internacionales.
Los del Río, al compartir este reconocimiento con Manuel de la Peña, no solo celebraron sus logros individuales, sino también la amistad que los une. En palabras del dúo, el trabajo del cardiólogo «nos está abriendo la esperanza a vivir una vida más larga y saludable». Esta ceremonia no solo ratificó la relevancia de la música como puente cultural y herramienta diplomática, sino que también puso de relieve el impacto global de «La Macarena», que aún resuena con fuerza, uniendo culturas y generaciones en un ritmo común.