En un esfuerzo por preservar uno de los símbolos más icónicos de Madrid, el Área de Cultura, Turismo y Deporte del Ayuntamiento ha dado inicio a rigurosos estudios preliminares con el objetivo de evaluar el estado de conservación de la histórica Fuente de Cibeles. Estos análisis, que utilizan sofisticadas tecnologías como microscopios electrónicos y rayos X, determinarán si el monumento necesita una futura restauración para asegurar su esplendor duradero frente a las adversidades del tiempo y la contaminación.
Bajo el atento diseño del arquitecto Ventura Rodríguez, la Fuente de Cibeles se erige desde 1782 como un insigne testimonio del reinado de Carlos III. Sus imponentes esculturas, obra de los renombrados artistas Francisco Gutiérrez y Roberto Mitchel, representan la figura mitológica de la diosa Cibeles conduciendo un carro tirado por dos leones, Hipómenes y Atalanta. Este emblemático monumento no solo es un referente arquitectónico, sino también un faro cultural y simbólico para los madrileños.
Los recientes trabajos de vaciado de la fuente, realizados a principios de febrero, ofrecieron una escena inusual en la capital: la oportunidad de contemplar de cerca la majestuosa obra y a los leones que la escoltan. Durante estos procedimientos, técnicos especializados realizaron exhaustivas inspecciones del monumento, recolectando muestras cruciales que permitirán un análisis detallado de los materiales y cualquier alteración presente.
La detección prematura de posibles patologías es esencial para la conservación del patrimonio cultural, como afirma Victoria Sandstede, responsable del Servicio de Conservación Preventiva. Estos «chequeos rutinarios», que se realizan cada cuatro meses, son comparables a una inspección técnica vehicular para monumentos, empleando instrumentos de última generación para observar hasta los materiales más internos de la estructura.
Actualmente, los indicios sugieren que la fuente presenta principalmente suciedad superficial y algunos efectos del paso del tiempo y la contaminación. Sin embargo, no se anticipan intervenciones mayores según Sandstede. En los próximos meses, se llevarán a cabo más pruebas enfocadas en técnicas de limpieza y tratamientos de restauración potenciales, culminando en un informe detallado que se espera para dentro de 14 semanas.
La Fuente de Cibeles ha sido testigo de numerosos acontecimientos históricos a lo largo de sus más de dos siglos de existencia, desde la Guerra de la Independencia hasta celebraciones deportivas contemporáneas. Las victorias del Real Madrid en las décadas pasadas han consolidado a la Cibeles como un lugar de tradición festiva para los aficionados, simbolizando una conexión inquebrantable entre historia y modernidad.
Mientras aguardan los resultados finales de estos estudios, tanto madrileños como visitantes pueden mantener la confianza en que cualquier actuación futura garantizará que la Fuente de Cibeles continúe siendo un emblema de Madrid, conservando su majestuosidad para generaciones futuras y celebraciones por venir.
Fuente: Diario.Madrid.es Mejorando Madrid