La Autoridad de Aviación Militar del Reino Unido ha dado un paso decisivo en el futuro de la aviación no tripulada al certificar el avión Protector RG Mk1, conocido como MQ-9B. Este logro, alcanzado el 29 de abril, marca un avance crucial en la operación de aeronaves no tripuladas, permitiendo su uso sin limitaciones geográficas, incluso sobre áreas urbanas. Esta certificación representa un importante hito para el Reino Unido y la industria de sistemas aéreos no tripulados (UAS), consolidando a General Atomics Aeronautical Systems, Inc. como un líder del sector.
El desarrollo del MQ-9B comenzó en 2014, cuando GA-ASI decidió mejorar el probado MQ-9A para cumplir con los estrictos estándares de la norma STANAG 4671 de la OTAN. Las innovaciones en su diseño incluyen protección contra rayos, sistemas antihielo y capacidad para resistir fatiga y daños, asegurando así la fiabilidad operativa del aparato.
Linden Blue, CEO de GA-ASI, destacó la importancia del logro y mencionó que la empresa invirtió más de 500 millones de dólares y 11 años de trabajo para cumplir con los estándares de la OTAN. El proceso de certificación involucró tres aviones de vuelo y extensas evaluaciones ambientales y estructurales, respaldadas por más de 140,000 páginas de datos técnicos.
La Real Fuerza Aérea Británica ha comenzado a integrar estas aeronaves en su base de RAF Waddington, recibiendo hasta ahora 10 de las 16 unidades encargadas. Neil Venables, responsable del certificado de tipo del Protector, enfatizó la dedicación y esfuerzo conjunto que hicieron posible este logro.
El MQ-9B es considerado el UAS de media altitud y larga resistencia más avanzado del mundo, con variantes como SkyGuardian® y SeaGuardian®. Además del Reino Unido, países como Bélgica, Canadá, Polonia y Japón han solicitado esta aeronave para sus operaciones militares y de vigilancia.
Con más de 8 millones de horas de vuelo acumuladas, la línea de UAS de General Atomics reafirma su posición como la principal solución para misiones aéreas no tripuladas, continuando su legado de más de tres décadas.