El fascinante escenario del mundo sin humanos cobra nueva vida con las declaraciones del profesor de Zoología, Tim Coulson, de la Universidad de Oxford, quien sugiere que los pulpos podrían emerger como la especie dominante en caso de que la humanidad desapareciera. Los pulpos, reconocidos por su inteligencia suprema y capacidad para manipular objetos, poseen los atributos físicos y mentales necesarios para evolucionar hacia la construcción de una civilización bajo el agua. Según Coulson, estos cefalópodos no solo cuentan con destreza y curiosidad, sino también con un avanzado sistema nervioso que les permitiría prolongar su tiempo fuera del agua y desarrollar nuevos métodos de caza, afianzando su potencial para colonizar la Tierra.
En un análisis comparativo, Coulson destaca que otros candidatos aparentes, como los primates, enfrentarían desafíos similares a los humanos, lo que eventualmente los llevaría a la extinción. Aunque el ascenso de los pulpos es de naturaleza especulativa y depende de múltiples variables evolutivas, estos invertebrados presentan notables capacidades de adaptación que podrían asegurar su supervivencia en un planeta cambiante. A pesar de su corta vida, de entre 1,5 y cinco años, los pulpos alcanzan rápidamente la madurez física e intelectual y, gracias a su cognición avanzada y uso de herramientas, plantean una intrigante posibilidad sobre quién podría suceder a la humanidad como la especie inteligente del planeta.
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