Tarragona, en el sur de Cataluña, ofrece una combinación perfecta de mar y montaña, con encantadores pueblos medievales como Montblanc y Siurana. La provincia destaca por su rica gastronomía, con especialidades como la escalivada y los vinos del Priorat. Los amantes de la naturaleza y el deporte encuentran en Prades y La Ametlla de Mar paisajes ideales para actividades al aire libre. La Costa Dorada, conocida por sus playas, esconde también rincones menos explorados como la playa del Fangar. La Ametlla de Mar, a 55 kilómetros de Tarragona, es un destino costero que combina naturaleza, buena gastronomía y tranquilidad, perfecto para unas vacaciones relajantes.
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