Uno de los testigos clave en la situación de emergencia que se vivió alrededor de la presa de Forata informó que a las 19 horas se activó la alarma en el Centro de Coordinación Operativa Integrada (CECOPI). Este hecho se debió a la amenaza inminente de rotura de la presa, lo que desencadenó una rápida respuesta de las autoridades competentes. La situación fue calificada de grave, movilizando a los equipos de emergencia y alertando a la población de las áreas potencialmente afectadas para garantizar su seguridad.
La crisis por la presa de Forata obligó al envío de un mensaje de alerta a los residentes de la zona, instándolos a seguir instrucciones específicas para evitar daños. Los equipos de seguridad trabajaron en conjunto para evaluar la estructura y tomar medidas preventivas, mientras las comunicaciones oficiales mantenían informada a la ciudadanía sobre el desarrollo de los acontecimientos. A medida que se desplegaron las acciones necesarias, las autoridades continuaron supervisando la situación con el objetivo de prevenir cualquier incidente mayor.
Leer noticia completa en El Mundo.