En el Congreso, el Partido Popular (PP) ha expresado su desconfianza hacia el ministro de Política Territorial, Ángel Víctor Torres, después de que este negara conocer al comisionista Víctor de Aldama, implicado en la trama de corrupción conocida como «caso Koldo». La cuestión ha surgido a raíz de la investigación sobre la compra de mascarillas, donde Torres aseguró no conocer a Aldama, aunque posteriormente moderó su afirmación, dejando abierta la posibilidad de haber tenido algún encuentro con él. Esto ha llevado al PP a solicitar que la Mesa del Congreso remita el caso a la Fiscalía, argumentando una presunta «omisión a la verdad» por parte de Torres. Durante el debate, Ángel Ibáñez, representante del PP, acusó al Gobierno de Pedro Sánchez de estar anclado en la mentira para mantenerse en el poder, y exhortó a la presidencia del Congreso a no ignorar esta situación.
Por otro lado, el debate ha empujado a diferentes partidos a posicionarse. La diputada socialista María Dolores Corujo defendió al ministro Torres, subrayando que no tiene relación alguna con la citada trama y que cuenta con el respaldo absoluto del Gobierno central, al tiempo que criticó al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, por construir su estrategia en base a falsas acusaciones. En contraste, Andrés Rodríguez de Vox desestimó la propuesta del PP al considerarla llena de «incoherencias y contradicciones», sugiriendo que es representativa de una oposición que ni es efectiva ni auténtica. Mientras las divisiones políticas continúan, la cuestión de cómo actuar frente a estas alegaciones sigue siendo un tema candente en el ámbito parlamentario.
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