El Jurado del Premio Ciudad de Alcalá de Poesía, en su quincuagésima quinta edición, ha comunicado el fallo de este año, otorgando el prestigioso galardón a la obra «Cosas que no se fueron a ninguna parte”, presentada con el número de registro 345. Al abrir la plica, se reveló que el autor es Álvaro Carbonell Cerdá, residente en Albatera, Alicante.
El comité evaluador estuvo compuesto por destacados miembros del ámbito cultural y literario: el concejal de Cultura, Santiago Alonso; el ganador de la edición anterior, Antonio Rivero; el periodista, escritor y poeta Juan José Téllez; y el escritor, ensayista, traductor y poeta Felipe Benítez. Esta cohesión de expertos dio como resultado una cuidadosa selección de la obra vencedora.
Antes de decidir el ganador, el jurado revisó un total de 416 propuestas, de las cuales preseleccionó 12 trabajos que consideraron dignos de llegar a la fase final. Estas creaciones finales competían por la distinción, destacándose la intensa calidad y diversidad temática presente en ellas.
La obra de Carbonell Cerdá, estructurada en cuatro partes y contenida en un total de cuarenta y tres poemas, fue especialmente alabada por el jurado. De ella destacaron “una temática muy original y variada, incluyendo temas políticos, vivencias y recuerdos personales, con una presentación muy bien estructurada”. Este elogio subraya la capacidad del autor para abordar cuestiones complejas y personales con una narrativa poética cautivadora y bien organizada.
El Premio Ciudad de Alcalá de Poesía, con una trayectoria impecable, sigue reafirmándose como un referente en la promoción de la creación poética, proporcionando una plataforma para que tanto autores consagrados como emergentes puedan mostrar su talento y creatividad. Este año, Álvaro Carbonell Cerdá se une a la lista selecta de poetas que han dejado huella en este certamen, añadiendo así una nueva página a la rica historia de la poesía contemporánea española.