El papa Francisco, conocido mundialmente por su enfoque progresista y su humildad, ha fallecido a los 88 años en su residencia de la Casa Santa Marta en Roma, según confirmó el cardenal Kevin Joseph Farrel. Francisco, que asumió el papado en 2013, fue visto por última vez en público el domingo mientras daba la bendición Urbi et Orbi desde el balcón de la basílica de San Pedro, después de la tradicional misa del Domingo de Resurrección. Era reconocido por su talante dialogante y su firme postura en defensa de la paz, el combate al cambio climático y el apoyo a los sectores más desfavorecidos. Su pontificado estuvo marcado por un esfuerzo constante por transformar la Iglesia en un espacio de servicio y refugio, enfrentándose a numerosos desafíos a lo largo de su liderazgo.
El Gobierno de España ha decretado tres días de luto oficial en honor al pontífice, cuya muerte ha generado una ola de reacciones a nivel mundial. Aunque las causas exactas del fallecimiento de Francisco se revelarán después del rito de confirmación de su muerte, que se llevará a cabo esta noche en la capilla de su residencia, informes preliminares sugieren que un ictus podría haber sido la causa del deceso. Durante su tiempo como líder de la Iglesia Católica, el papa Francisco ganó notoriedad por su capacidad para abordar problemas contemporáneos y su interés por modernizar la institución, dejando un legado que será profundamente evaluado en los años venideros.
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