La Administración Trump ha llevado su cruzada contra las políticas de diversidad e inclusión al gigante del entretenimiento, Disney. Brendan Carr, presidente de la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), ha iniciado una investigación en contra de la empresa, señalando preocupaciones por sus políticas de diversidad que, según él, han causado polémicas. Carr, en una carta dirigida al consejero delegado de Disney, Bob Iger, ha expresado que, aunque la compañía ha retractado algunos de sus programas emblemáticos en el ámbito de la inclusión, las acciones no son suficientes para la Casa Blanca. La FCC ya ha abierto una investigación similar contra Comcast, indicando que estas medidas van en línea con la ofensiva de la administración Trump, que critica lo que percibe como una discriminación inversa hacia los blancos.
La investigación contra Disney coincide con el estreno de la nueva versión en vivo de Blancanieves, protagonizada por Rachel Zegler, la cual ha suscitado controversia, sumándose a la presión sobre la compañía. Un portavoz de Disney ha declarado al Wall Street Journal que esperan la comunicación oficial de la FCC para abordar sus preocupaciones. Mientras la FCC cuestiona el enfoque inclusivo de Disney, un tribunal federal ha emitido un fallo que desafía a la Administración Trump, bloqueando partes de una orden ejecutiva que busca restringir las políticas de inclusión en el Gobierno federal. El juez Matthew Kennelly ha frenado la implementación de esta medida, permitiendo que las empresas no estén obligadas a presentar certificados que demuestren la ausencia de programas de diversidad, una decisión que sitúa un freno temporal a los esfuerzos de la administración para limitar estas iniciativas.
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