El Museo Muñoz Sola de Arte Moderno en Tudela, Navarra, se ha convertido en el nuevo hogar temporal de una destacada obra de Francisco de Zurbarán, gracias al proyecto colaborativo «El arte que conecta», impulsado por el Museo del Prado y Telefónica. La pieza en cuestión, «La Inmaculada Concepción», estará en exhibición hasta el 17 de noviembre, ofreciendo a los visitantes una oportunidad única de admirar una de las pinturas tempranas del artista español.
La obra, perteneciente a la donación Arango, se distingue por un enfoque poco convencional de la figura de la Virgen María. A diferencia de otras representaciones, esta versión de Zurbarán presenta a la Inmaculada con los brazos extendidos y la mirada erguida hacia el cielo, en lugar de las tradicionales manos juntas en oración. Este gesto, acompañado de un notable giro corporal, añade una dinámica visual que anticipa el tratamiento posterior de Bartolomé Esteban Murillo, quien consolidaría este simbolismo en el siglo XVII.
Destacan también los colores utilizados por Zurbarán: el blanco inmaculado de la túnica, el azul profundo del manto y el dorado del entorno. Estos tonos, aplicados con precisión y sin interferencias, crean un notable sentido de espacio y volumen, reforzando el efecto de movimiento generado por los pliegues cuidadosamente organizados. Este tratamiento cromático contrasta con las representaciones más estáticas de la escuela sevillana de la época.
«La Inmaculada Concepción» es una de las tantas obras maestras que «El arte que conecta» planea llevar por toda España. En el marco del centenario de Telefónica, el proyecto se propone estrechar los lazos culturales y acercar el arte a diversas comunidades, con una programación que incluye la exhibición de obras de otros grandes maestros como Velázquez, Goya, Rubens y Murillo en 18 localidades del país.
Esta iniciativa continúa la estrategia del Museo del Prado de expandir su presencia más allá de sus muros, una trayectoria que comenzó en 2019 durante su Bicentenario. En esa ocasión, el proyecto «De Gira por España» permitió que el museo visitara aproximadamente cuarenta ciudades. Paralelamente, «El Prado en las calles» sigue llevando réplicas fotográficas de sus obras a espacios públicos en Andalucía, después de pasar por otras regiones como Castilla y León, Castilla-La Mancha y Extremadura.
Con proyectos como estos, el Prado y Telefónica refuerzan su compromiso de facilitar el acceso al patrimonio cultural y de enriquecer la vida cultural de las comunidades a nivel nacional.