En la provincia de Teruel, dentro de la comunidad autónoma de Aragón, se encuentra escondida una de las maravillas naturales más fascinantes de Europa: la sima de San Pedro. Este impresionante pozo situado en el municipio de Oliete es el más grande de su tipo en Europa, resultado de miles de años de erosión causada por el flujo constante de agua. Con una profundidad de 120 metros y un diámetro de 65 metros en su parte más ancha, la sima es un espectáculo natural que cada año atrae a numerosos turistas, aunque su acceso está restringido para proteger el ecosistema local. La formación geológica de la sima es un testimonio de la fuerza de la naturaleza y la acción del tiempo, resaltando el impacto erosivo del agua sobre la roca calcárea de la región.
La sima de San Pedro, además de su impresionante tamaño, posee un ecosistema subterráneo único alimentado por la filtración de agua de manantiales y del río Martín. Esta laguna subterránea es fundamental para la fauna local, proporcionando un hábitat para especies como la graja, la paloma bravía y el estornino. El entorno que rodea la sima, parte de la sierra de San Just, ofrece un contraste de serenidad y belleza natural frente al bullicio urbano. Oliete, el municipio que alberga esta joya natural, complementa su atractivo con una rica historia reflejada en su arquitectura, incluyendo la iglesia de San Pedro y el castillo de Oliete. Aunque el acceso a la sima está restringido, su majestuosidad sigue siendo un testimonio de la belleza vulnerable de nuestro planeta, ofreciendo a los visitantes una experiencia única de contemplación y maravilla natural.
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