El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, asumirá oficialmente su cargo en una ceremonia que tendrá lugar el lunes 20 de enero de 2025, en un entorno atípico dentro del Capitolio. Debido a las extremas condiciones climáticas que se pronostican para ese día, se ha decidido trasladar la tradición de la toma de posesión del exterior a la emblemática Rotonda del Capitolio. Esta decisión sigue el protocolo previsto para situaciones de inclemencias meteorológicas, una medida que se utilizó por última vez en 1985, cuando Ronald Reagan juró su segundo mandato con temperaturas exteriores que llegaron a -13ºC. En esta ocasión, se esperan temperaturas que podrían descender hasta los -5ºC en Washington, como parte de una ola de frío que afecta a gran parte del país.
La transición hacia el interior del Capitolio no es nueva, ya que ha sido necesaria en varias ocasiones por diferentes razones a lo largo de la historia. La decisión busca evitar las condiciones adversas que una vez cobró la vida de William Henry Harrison, noveno presidente de Estados Unidos, quien murió de neumonía apenas 31 días después de su investidura al haber pronunciado su discurso sin abrigo a pesar de las gélidas temperaturas. Este cambio de ubicación de la ceremonia de posesión tiene como escenario la histórica Rotonda del Capitolio, una sala de arquitectura neoclásica que recibe este importante acto bajo su imponente cúpula, testimonio de la historia arquitectónica estadounidense y diseño de figuras como William Thornton y Charles Bulfinch. La ola de frío, que se extenderá hasta el miércoles, también traerá consigo nevadas significativas en Washington y Nueva York, destacando la rigurosidad del invierno en el inicio del nuevo mandato presidencial.
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