En un giro significativo dentro del marco de medidas de seguridad previamente establecidas, se ha implementado un nuevo programa que facilita el contacto de los familiares con las víctimas de fallecimientos recientes. Esta medida responde a la demanda social y al deseo de ofrecer un apoyo más humano y cercano en momentos de duelo, superando las restricciones que impidieron hasta ahora un enlace adecuado. El programa, que se pondrá en marcha próximamente, contempla protocolos de seguridad adaptados para permitir la comunicación sin poner en riesgo la integridad sanitaria o emocional de las familias involucradas.
La iniciativa surge en un contexto en el que se había criticado la rigidez de las medidas de seguridad que mantenían a las familias distantes de sus seres queridos fallecidos, creando tensiones y malestar social. Con esta nueva disposición, se espera aliviar el sufrimiento de los allegados, facilitando un proceso de duelo más humano y comprensivo. Autoridades han asegurado que todos los contactos estarán supervisados y seguirán las normativas de salud vigentes, equilibrando la necesidad de seguridad con el imprescindible apoyo emocional para las familias afectadas.
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