Luis Miguel Romero-Rodríguez, investigador especializado en comunicación estratégica y profesor de la Universidad Rey Juan Carlos, subraya que estamos en plena transición del tradicional SEO (Search Engine Optimization) al emergente SXO (Search Experience Optimization). Esta transformación resalta la importancia de la experiencia del usuario y la autenticidad de los contenidos como los nuevos pilares del posicionamiento en internet.
En el entorno digital actual, los motores de búsqueda como Google y Bing, junto con las aplicaciones de Inteligencia Artificial, han revolucionado la gestión de la presencia online. «Los continuos cambios en los algoritmos han dejado atrás los días de optimizar contenidos únicamente con pautas rígidas de palabras clave y enlaces», observa Romero-Rodríguez. Aunque no se especializa en posicionamiento web, su análisis de estrategias digitales en diversas organizaciones hispanoamericanas ha evidenciado una transición hacia el SXO.
Romero-Rodríguez explica que los buscadores y las IA buscan ofrecer la información más precisa sin que el usuario deba visitar numerosas páginas web. «Esto está sucediendo porque la IA se integra en programas y aplicaciones móviles, compitiendo por entregar resultados de búsqueda exactos», apunta. Él destaca que los contenidos de valor, que atraen más a los usuarios y a la IA, son esenciales porque proporcionan respuestas más precisas y personalizadas.
Anteriormente, el tráfico web era un indicador crucial para el SEO. Sin embargo, los algoritmos actuales consideran múltiples factores como el tiempo de permanencia en la página, la tasa de rebote, la calidad de los enlaces, y la longitud y unicidad del contenido. «Esto está remodelando el panorama digital y redefiniendo el significado de la comunicación corporativa digital», señala Romero-Rodríguez.
La evolución del SEO al SXO implica un nuevo enfoque centrado en la experiencia del usuario. La meta ya no es solo ser encontrado, sino ofrecer una experiencia web intuitiva y valiosa. Según Romero-Rodríguez, aunque las estrategias SEO técnicas siguen siendo importantes, el contexto actual demanda contenidos auténticos y originales para evitar la saturación generada por los contenidos automatizados.
En el corazón del SXO está la creación de contenido de valor. En lugar de saturar las páginas con contenido generado por IA que puede ser superficial o duplicado, las organizaciones deben centrarse en producir información útil y original. «Es una vuelta al valor de la artesanía de la creación de contenidos», comenta Romero-Rodríguez, haciendo hincapié en la importancia del análisis crítico y la reinterpretación humana.
La IA se alimenta del contenido disponible en la web para mejorar sus respuestas y generar predicciones precisas. Por lo tanto, las organizaciones deben crear contenido novedoso y bien fundamentado que no solo complazca a los motores de búsqueda, sino que también conecte auténticamente con el público.
El cambio de paradigma del SEO al SXO influye también en la reputación online de las organizaciones. En una era donde las percepciones se moldean continuamente a través de comentarios y opiniones en redes sociales y motores de búsqueda, la experiencia del usuario se convierte en el pilar central de las estrategias de contenido digital. «La experiencia del usuario debe ser el principal pilar en el que giren las estrategias de contenido digital», reafirma el investigador.
Romero-Rodríguez ilustra su punto con el ejemplo de Mayo Clinic, que a pesar de no tener presencia en España, frecuentemente aparece como uno de los primeros resultados en búsquedas relacionadas con la salud. Esta visibilidad se debe a la creación constante de contenido de valor, respaldado por evidencia científica y escrito por expertos, que genera autoridad de dominio y referencialidad.
Concluye Romero que las organizaciones deben enfocar sus esfuerzos en ofrecer experiencias valiosas y satisfactorias. «El éxito digital actual no depende exclusivamente de atraer tráfico, sino de ofrecer una experiencia memorable que conecte con el usuario y resuelva sus necesidades».