El Barcelona B ha conseguido aplazar su próximo partido en la Primera Federación debido a la falta de jugadores disponibles. Originalmente programado para el 12 de octubre contra el Sanse, filial de la Real Sociedad, el encuentro se pospuso ya que el Barcelona solo cuenta con 10 futbolistas aptos de su plantilla de 23 miembros. Tres jugadores se encuentran representando a sus selecciones nacionales y 10 están lesionados, lo que lleva al club a incumplir con el mínimo de 11 jugadores disponibles requerido para alinearse en un partido. Aunque el reglamento de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) es estricto respecto a los motivos de fuerza mayor para aplazamientos, permite excepciones si un club no puede completar el equipo necesario por causas imprevisibles como lesiones combinadas con convocatorias nacionales.
La RFEF emitió un comunicado confirmando su decisión de reprogramar el partido tras la solicitud del Barcelona. En su apelación, el club presentó documentos detallados, incluidos informes médicos y convocatorias internacionales para respaldar su situación, destacando también la presencia habitual de cinco juveniles que también han sido convocados por sus selecciones. Esta situación subraya la complicada gestión de los equipos filiales y juveniles durante los periodos de partidos internacionales y lesiones simultáneas, mostrando la importancia de una plantilla amplia y adaptable en las competiciones de fútbol profesional.
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