En Valencia, la solidaridad y el deporte se han unido para brindar refugio a las víctimas de la inusual gota fría que ha azotado la región, dejando a varios residentes sin hogar de un momento a otro. L’Alqueria del Basket, un emblemático centro deportivo conocido por su destacado papel en el baloncesto europeo, ha sido temporalmente reconvertido en refugio de emergencia, albergando a 170 personas al caer la noche del miércoles. Víctor Luengo, exjugador y capitán del Valencia Basket, subraya la gravedad de la situación mientras ofrece su apoyo a familiares y afectados. El club no ha cesado de recibir personas desde la noche del martes y ha movilizado a sus trabajadores para atender a los damnificados, proporcionando alimentos, ropa y un techo a aquellos que perdieron todo.
Estas acciones de apoyo se han replicado en otros rincones de la ciudad. El Valencia CF ha unido fuerzas con el Banco de Alimentos, transformando el estadio Mestalla en un punto de recolección para productos básicos. Entre los afectados, se alzan historias de supervivencia como la de Sergio Margalef, quien junto a otros ciudadanos y miembros de la Guardia Civil pasó la noche en un puente tras haber sido sorprendidos por la furia del agua. Las empresas y organizaciones locales se han volcado en la asistencia, proveyendo artículos imprescindibles como mantas y zapatillas. Esta respuesta solidaria ha sido crucial para aquellos que, como Roman y Berangere, reviven la angustia de otras catástrofes naturales en un contexto donde la unión y el apoyo han mitigado el dolor de una noche que nunca olvidarán.
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