En una tarde de contrastes en la plaza de toros, el maestro enfrentó el desafío de lidiar con dos toros de la ganadería Tornay que resultaron decepcionantes en términos de bravura y calidad. Pese a las dificultades, la faena logró mantener el interés del público, destacándose por la destreza y templanza del maestro al sortear los obstáculos presentados por los toros. La tarde, cargada de expectativa, sirvió como antesala al acto final donde otros nombres brillaron con luz propia.
El triunfo del día se lo llevaron Juan Ortega y Olga Casado, quienes supieron cautivar y entusiasmar a los asistentes con una actuación remarcable. Ortega demostró su habilidad y arte con capote y muleta, mientras que Casado sorprendió con su fuerte personalidad en el ruedo. Ambos toreros lograron elevar el ánimo del evento, dejando atrás la opaca presentación inicial y culminando la jornada con celebraciones y aplausos por parte de los aficionados.
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