El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (CERMI) ha trasladado a la Reina Letizia la urgencia de que la respuesta a la catástrofe provocada por las lluvias torrenciales en Valencia y otras regiones de España sea eminentemente social. Así lo manifestó el presidente del CERMI, Luis Cayo Pérez Bueno, durante una reunión de trabajo en la que participaron seis organizaciones sociales que están actuando sobre el terreno para atender las necesidades de la población afectada.
La reunión, que se extendió por más de dos horas, tuvo como objetivo informar a la Reina sobre las acciones que las entidades sociales están llevando a cabo para ayudar a las personas damnificadas y cubrir sus necesidades más apremiantes. Al inicio del encuentro, cada entidad expuso su realidad particular y explicó el impacto que la catástrofe ha tenido en sus respectivos grupos.
Durante la sesión, los participantes destacaron la importancia de promover una “cultura de las emergencias en España, en su dimensión social” que permita abordar y gestionar situaciones de crisis desde una perspectiva que contemple a los grupos más vulnerables, quienes, lamentablemente, se ven cada vez más afectados. En este contexto, Luis Cayo Pérez Bueno sugirió la creación de una Conferencia sobre “la dimensión social de las emergencias” para fomentar el conocimiento y la sensibilización en este ámbito. “Debemos producir conocimientos suficientes para crear una cultura social sobre el tema, creando conciencia pública y un espacio en la agenda política”, afirmó el presidente de CERMI.
La Reina Letizia, por su parte, se comprometió a mantener reuniones periódicas de este tipo para dar seguimiento a los temas críticos abordados en esta primera sesión, destacando la importancia de la constancia y la continuidad en el tiempo para enfrentar estos desafíos de manera efectiva.
Durante el encuentro, también se abordó el impacto de la catástrofe en la salud mental de las víctimas, cuidadores y personal de intervención. Todos coincidieron en la necesidad de “intervenir” y “tutelar” el bienestar mental de estos grupos para proteger su salud en un contexto de alta tensión y estrés emocional.