El Banco Central Europeo (BCE) se reunirá este jueves para decidir sobre los tipos de interés después de una pausa en julio y un recorte en junio. Los analistas ya asumen prácticamente que se realizará un recorte de 25 puntos básicos, aunque la cifra oficial se conocerá una vez que la presidenta Christine Lagarde haga el anuncio. Las previsiones económicas del BCE, que serán actualizadas, sugieren que la inflación podría alcanzar el 2% en el próximo año. Este dato es crucial, ya que marca el nivel de estabilidad de precios para la institución. Sin embargo, los expertos no están de acuerdo sobre si habrá pistas concretas acerca de futuros recortes adicionales.
Aunque el BCE tiene como objetivo moderar las tasas de interés cuando los datos macroeconómicos lo justifiquen, las opiniones varían sobre el impacto y el ritmo de estas decisiones. Algunos, como François Rimeu de Crédit Mutuel Asset Management, son menos optimistas sobre las pistas que pueda ofrecer Lagarde, mientras que Germán García Mellado de A&G espera que cualquier movimiento a la baja sea más probable en diciembre que en octubre. La mayoría de los economistas encuestados esperan un recorte de 25 puntos básicos y la estabilidad de estos pronósticos minimiza la posibilidad de movimientos abruptos en los mercados financieros. Además, los datos más recientes de Eurostat muestran una inflación interanual del 2,2% en agosto, aunque se prevé que los precios aumenten en el último trimestre del año debido al consumo interno.
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