El FC Barcelona se encuentra en una carrera contrarreloj para inscribir a los centrocampistas Dani Olmo y Pau Víctor antes de que termine el año. El club ha solicitado oficialmente una nueva licencia a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), dejando claro que no ha pedido ni recibido ninguna moratoria para alargar el plazo. Esta petición surge después de que un tribunal de Barcelona negase al equipo la posibilidad de registrar a los jugadores debido a las limitaciones financieras impuestas por el ‘Fair Play’ económico, situación que ha complicado las intenciones del club para reforzar su plantilla de cara al resto de la temporada.
Sin embargo, el desafío se mantiene, ya que LaLiga ha subrayado que, hasta la fecha, el Barcelona no ha presentado una solución viable que cumpla con la normativa económica vigente. Con el tiempo agotándose, el club, liderado por Joan Laporta, explora soluciones alternativas, como generar ingresos a través de la venta de palcos VIP en el renovado Spotify Camp Nou. La situación es especialmente crítica para Dani Olmo, cuya cláusula le permitiría liberarse del contrato a partir de enero de 2025 si no es inscrito a tiempo. El reloj avanza hacia la medianoche del 31 de diciembre, forzando al club a actuar con rapidez para evitar perder a uno de sus talentos prometedores.
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