El Banco de España ha presentado su informe trimestral de diciembre de 2024, destacando una revisión al alza en sus previsiones de crecimiento económico para el próximo año. La institución ha elevado su estimación del incremento del Producto Interior Bruto (PIB) español al 3,1% para 2024. Este nuevo cálculo supera en cuatro décimas el crecimiento de 2023 y se sitúa tres décimas por encima de lo proyectado en el documento de septiembre. El ajuste refleja un rendimiento económico más favorable de lo anticipado durante la segunda mitad del año, pese al impacto negativo de la Depresión Aislada en Niveles Altos (DANA) de octubre, que se espera reste entre 0,1 y 0,2 puntos al crecimiento del último trimestre.
De cara a los próximos años, el Banco de España prevé una moderación en el ritmo de expansión económica, anticipando un 2,5% para 2025, un 1,9% en 2026, y un 1,7% en 2027. Estas proyecciones obedecen tanto al impulso proporcionado por las medidas de apoyo a los afectados por la DANA como al ambiente de tipos de interés más bajos. Sin embargo, el debilitamiento del desempeño de los socios comerciales de España podría limitar este crecimiento.
La inflación en España continuará disminuyendo, con una tasa media proyectada del 2,9% en 2024, y se espera que siga una tendencia descendente hasta alcanzar el 1,7% en 2026, aumentando ligeramente al 2,4% en 2027 debido a la implementación de nueva normativa europea sobre derechos de emisión. La inflación subyacente también se moderará del 2,9% en 2024 al 1,8% en 2027.
El informe destaca un panorama laboral positivo, aunque el crecimiento será más mesurado. Se estima que la tasa de paro descenderá del 12,2% en 2023 a menos del 10% para 2027, apoyada por la creación de empleo y el aumento de la población económicamente activa.
Una de las adversidades enfrentadas en 2024 fue la DANA de octubre, que afectó considerablemente a la actividad económica en el este de España, particularmente en la provincia de València. Las ayudas y programas de recuperación podrían mitigar parte del impacto económico negativo en los primeros meses de 2025.
En cuanto a las finanzas públicas, el déficit se situará alrededor del 3,4% del PIB en 2024, con una reducción paulatina hasta alcanzar un 2,7% en 2027. Las ayudas relacionadas con la DANA podrían aumentar el déficit en un 0,5% entre 2024 y 2025, aunque se contempla que parte de este desvío se compense con fondos europeos.
La economía del área del euro mostró un crecimiento del 0,4% en el tercer trimestre de 2024, pero las expectativas para el cierre del año son menos alentadoras. A nivel global, las tensiones geopolíticas, como los conflictos en Ucrania y Oriente Medio, junto con las posibles políticas arancelarias de la nueva Administración Trump en Estados Unidos, generan incertidumbres que podrían influir significativamente sobre la economía mundial.
En resumen, el informe del Banco de España concluye con una perspectiva de robusto desarrollo económico para el país a finales de 2024, conducido por el consumo privado, la inversión y el respaldo de los fondos Next Generation EU. No obstante, advierte que las incertidumbres globales podrían influir en la economía española en los años venideros. El informe completo está disponible en el sitio web del Banco de España.