El Ayuntamiento de Madrid ha anunciado el inicio de las obras de rehabilitación del túnel que corre por debajo de la plaza Mayor, programadas para comenzar este lunes, 9 de junio. Con una inversión de 800.000 euros y una duración estimada de tres meses, este proyecto busca reforzar la estructura del túnel y preservar la seguridad de los usuarios, así como el correcto funcionamiento de los aparcamientos adyacentes.
Detectado a través de revisiones del Área de Obras y Equipamientos, el deterioro del forjado se atribuye a filtraciones de agua que han comprometido las vigas y placas del túnel, generando fisuras y corrosión. La zona más afectada se sitúa en la intersección de los ramales provenientes de Atocha y Toledo.
El plan de intervención abarca el interior del túnel y una zona específica de 400 metros cuadrados en el suroeste de la plaza Mayor. Las primeras tareas incluirán la retirada de adoquines, la demolición de la losa actual y la sustitución de las placas alveolares dañadas. Posteriormente, se aplicará una nueva losa de compresión y una membrana impermeabilizante, y se reinstalarán los adoquines originales.
Dentro del túnel, se montará una cimbra para estabilizar la estructura durante la obra. También se procederá a reemplazar el pavimento en las rampas, instalando una nueva capa de asfalto.
El proyecto se desarrollará en fases para reducir las molestias al tráfico. La primera fase comenzará el 9 de junio, limitando el acceso al túnel desde Toledo durante una semana. A partir del 16 de junio, el túnel se cerrará completamente, aunque los aparcamientos seguirán accesibles desde Atocha. Para el 26 de junio, se prevé el comienzo de los trabajos en la superficie de la plaza Mayor. Como ruta alternativa, los conductores podrán utilizar las calles de Segovia y Sacramento.
El Ayuntamiento planea realizar los trabajos en distintos turnos diarios para agilizar el proceso y reabrir el túnel lo antes posible, mitigando así el impacto en el entorno y la movilidad urbana.