El pleno del Ayuntamiento de Alcalá de Henares ha otorgado, por unanimidad, el título de Hijo Adoptivo de la ciudad a Fernando Galván Reula, Rector Emérito de la Universidad de Alcalá. Esta distinción llega tras la solicitud de la Sociedad de Condueños de los Edificios que fueron Universidad, destacando la conexión profunda entre la institución académica y la comunidad local.
La alcaldesa Judith Piquet expresó su satisfacción, subrayando la trascendencia del reconocimiento hacia Galván. Desde su llegada a Alcalá hace más de tres décadas, Galván ha sido una figura prominente, generando avances significativos en la Universidad y reforzando el vínculo con la ciudad y sus entidades. Su liderazgo ha sido clave para hacer de Alcalá de Henares una Ciudad Patrimonio de la Humanidad más visible y accesible, a través de proyectos académicos y culturales.
Fernando Galván Reula, nacido en Las Palmas de Gran Canaria, ha vivido en Alcalá desde 1994. A lo largo de su carrera, ha acumulado numerosos honores académicos, incluyendo doctorados Honoris Causa y prestigiosos reconocimientos internacionales. Su contribución ha trascendido el ámbito universitario, siendo distinguido como Oficial Honorario del Imperio Británico por la reina Isabel II en 2017.
Su enfoque se ha centrado en fortalecer los lazos entre la Universidad y la ciudad, colaborando con el Ayuntamiento y fomentando la participación de la ciudadanía en la vida académica mediante diversos proyectos y ofertas culturales. Durante su rectorado, impulsó importantes restauraciones de patrimonio histórico-artístico, como el patio de Santo Tomás de Villanueva y la Capilla de San Ildefonso, además de fomentar la celebración de eventos culturales significativos.
Una de sus iniciativas más destacadas es el Archivo Virtual Cisneros, que digitalizó archivos históricos trasladados a Madrid en 1836, recuperando así un patrimonio documental vital para la historia complutense.
Gustavo Severien, portavoz del equipo de Gobierno, justificó el reconocimiento a Galván por su incansable labor y contribuciones a Alcalá, apelando a todos para respaldar el nombramiento. La distinción como Hijo Adoptivo no solo celebra sus logros, sino que reafirma su legado y compromiso con la ciudad que lo acogió.


