El Atlético de Madrid ha sufrido un revés inesperado en su planificación futura, con la pérdida de su principal candidato para suceder a Diego Simeone. Rúben Amorim, el entrenador portugués del Sporting de Lisboa, era el elegido para tomar las riendas del equipo si el entrenador argentino decidiera dejar el cargo al final de la temporada. Sin embargo, el Manchester United ha dado un golpe sobre la mesa al pagar la cláusula de 10 millones de euros para incorporar de inmediato a Amorim, reemplazando al holandés Erik ten Hag, quien ha sido destituido. Amorim, que ha ganado notoriedad por su estilo moderno y exitoso, era ampliamente valorado en las filas del Atlético para continuar el legado del Cholo. Bajo su dirección, el Sporting de Lisboa ha conseguido nueve victorias en nueve jornadas de liga, con un impresionante récord de 30 goles a favor y solo dos en contra, lo que lo convierte en uno de los técnicos más cotizados en la escena europea actual.
La maniobra del Manchester United obliga ahora al Atlético a replantear su estrategia. Según fuentes de OKDIARIO, los representantes ya habían iniciado contactos preliminares con el entorno de Amorim, aunque siempre supeditados a la decisión de Simeone, cuyo contrato se extiende hasta 2027. No obstante, existe una cláusula que permite a ambas partes resolver el contrato si el equipo no logra clasificarse para la Liga de Campeones, lo que añade una capa de incertidumbre sobre el futuro del banco rojiblanco. Ante este panorama, el director de fútbol Carlos Bucero deberá buscar nuevas opciones para el banquillo, en un momento en el que el Atlético parece estar viviendo una de sus etapas más complicadas desde la llegada de Simeone en 2012, prácticamente fuera de la lucha por el título y con una situación comprometida en la clasificación para la Champions.
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