El ejecutivo Alfonso, conocido como el «parlanchín», cerró la plantilla del Mallorca durante la presentación del Trofeo Ciudad de Palma, dejando vacantes los dorsales 15, 16 y 20, lo que contrasta con su discurso oficial. En un contexto donde los medios de comunicación reproducen sin cuestionar la versión del club, se ha propagado la creencia de que las reformas se deben a accionistas americanos, cuando realmente son fruto del acuerdo con el fondo CVC de la LFP. Con el plazo para fichajes hasta el 31 de agosto, el director deportivo Pablo Ortells aún debe incorporar tres jugadores, aunque el entrenador Arrasate prefiere calidad sobre cantidad. Además, el jugador Gio se ha trasladado a Rusia sin que Krasnodar haya pagado los cuatro millones de euros acordados, lo que resalta la cuestionable gestión del club.
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