Durante el partido Valencia-Barcelona, el árbitro Sánchez Martínez no expulsó al joven defensa Pau Cubarsí tras un claro agarrón a Hugo Duro en el minuto 58, a pesar de que ya tenía una tarjeta amarilla. Este incidente frenó un prometedor contraataque del Valencia. Además, Robert Lewandowski empató el partido en el tiempo de descuento de la primera parte, con el Barcelona remontando finalmente con un penalti del delantero polaco en el segundo tiempo. Sánchez Martínez compensó su decisión inicial mostrando una amarilla a Andreas Christensen, quien reemplazó a Cubarsí para evitar una expulsión. Este encuentro estuvo marcado por múltiples decisiones polémicas del colegiado.
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