El gobierno de Estados Unidos ha decidido reforzar las defensas de Israel con el envío provisional del avanzado sistema antiaéreo de Defensa de Área de Gran Altitud Terminal (THAAD). Esta decisión, ordenada por el presidente Joe Biden y ejecutada por el secretario de Defensa, Lloyd Austin, responde a los recientes ataques con misiles balísticos lanzados por Irán contra Israel el 13 de abril y el 1 de octubre. El sistema THAAD, conocido por su capacidad de interceptar misiles a gran altitud, contribuirá a mejorar la defensa aérea integrada de Israel y subraya el compromiso de Washington con la seguridad del estado israelí y de los ciudadanos estadounidenses en la región. Esta medida forma parte de un ajuste más amplio de las fuerzas estadounidenses en Oriente Próximo para contrarrestar las amenazas de las milicias proiraníes.
El anuncio coincide con la reunión del gabinete del primer ministro israelí, que aborda las acciones a tomar tras el agresivo ataque iraní, aunque aún no se han desvelado detalles específicos de dicho encuentro. Israel ha declarado que responderá al lanzamiento de aproximadamente 200 proyectiles, incluidos misiles balísticos, por parte de Irán. La colaboración entre Estados Unidos e Israel en materia de defensa no es nueva; anteriormente, en 2019, Estados Unidos ya había desplegado una batería THAAD en Israel para ejercicios de formación defensiva. Además, el informe del Congreso de abril pasado destaca que Estados Unidos posee siete baterías de THAAD, complementarias al sistema Patriot, con un mayor alcance operativo, poniéndose de manifiesto la continua búsqueda de estrategias para fortalecer la defensa ante posibles represalias.
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