En un esfuerzo por combatir el narcotráfico, Estados Unidos ha hundido cuatro embarcaciones en el Caribe sur, cerca de las costas venezolanas, desde agosto. Estas acciones se enmarcan en la estrategia estadounidense para desmantelar redes de tráfico de drogas en la región, reforzando su presencia marítima y colaboración con países vecinos.
Las operaciones han estado dirigidas a interceptar cargamentos de drogas antes de que lleguen a su destino, afectando así las finanzas de los cárteles. El hundimiento de estas embarcaciones es un recordatorio del compromiso de Washington en la lucha contra el narcotráfico y su impacto en la seguridad regional. La medida también subraya las crecientes tensiones en la zona, donde la cooperación internacional es clave para enfrentar las amenazas transnacionales.
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