El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, ha anunciado que los opositores venezolanos que buscaban asilo en la Embajada de Argentina en Caracas han sido trasladados con éxito a Estados Unidos. El operativo, descrito como «preciso», permitió rescatar a estos opositores que, según el gobierno estadounidense, habían sido tomados como rehenes por el régimen de Nicolás Maduro. La embajada, que había estado bajo protección de Brasil después de la expulsión de los diplomáticos argentinos, fue el refugio de líderes como Pedro Urruchurtu, Claudia Macero, y Omar González, quienes enfrentaban cargos de conspiración y traición por parte de la administración venezolana. Rubio destacó que la operación fue posible gracias a la colaboración internacional y expresó que este evento subraya los repetidos abusos a los derechos humanos en Venezuela.
María Corina Machado, destacada dirigente opositora venezolana, expresó su gratitud por lo que calificó como una operación “impecable y épica”, y reafirmó su compromiso de liberar a todos los presos políticos en el país sudamericano. Ella y otros líderes opositores han denunciado el asedio sufrido en la embajada, incluyendo la falta de servicios básicos. Por su parte, el presidente argentino Javier Milei, se unió a las expresiones de agradecimiento hacia Estados Unidos, subrayando el éxito del operativo que, en sus palabras, devolvió la libertad a estos «verdaderos héroes». Este movimiento se produce en un contexto de crecientes tensiones políticas en Venezuela, donde muchas voces continúan pidiendo presión internacional para abordar las violaciones a los derechos humanos bajo el régimen actual.
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