Edgar Amador ha sido ratificado por unanimidad como nuevo Secretario de Hacienda de México, tras su nombramiento en sustitución de Rogelio Ramírez de la O. Amador enfrenta un panorama económico tenso, marcado por la reciente imposición de aranceles del 25% al acero y aluminio por parte de Estados Unidos, lo que ha generado incertidumbre en los mercados internacionales. En su primera declaración oficial, Amador aseguró que México no se verá envuelto en una guerra arancelaria, gracias a un sólido marco comercial y una política fiscal estable que, según él, protegerán al país de posibles fluctuaciones económicas. Destacó que bajo la administración del Banco de México y las directrices de la presidenta, se mantendrá una política fiscal robusta para enfrentar la volatilidad.
La ratificación de Amador fue respaldada por las principales bancadas de oposición, aunque no sin lanzar críticas y advertencias. El Partido Acción Nacional, el Partido Revolucionario Institucional y Movimiento Ciudadano expresaron sus expectativas de que el nuevo secretario enfrente desafíos como el bajo crecimiento económico y el aumento de la deuda pública durante el actual sexenio. Legisladores del PRI enfatizaron la necesidad de revisar el pacto fiscal y reducir el déficit, mientras que el grupo parlamentario de Morena, en el poder, subrayó el compromiso de Amador con la disciplina financiera y la inversión en infraestructura. Con este nombramiento, se espera que Amador implemente medidas que impulsen el crecimiento económico y la estabilidad en las finanzas públicas del país.
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