En la capital de España, el Ayuntamiento de Madrid lleva dos décadas trabajando en la accesibilidad de sus bibliotecas municipales. La Biblioteca Municipal de San Fermín es un ejemplo de estos esfuerzos, siendo la primera instalación en contar con señalización tacto visual en su interior. Este espacio, caracterizado por su diseño acogedor e inclusivo, busca el disfrute universal de la cultura.
Marta Otero, adjunta al Servicio de Tecnología, Innovación y Accesibilidad, afirma que la accesibilidad en las bibliotecas es tanto una obligación legal como una oportunidad para enriquecer las comunidades, promoviendo inclusión, igualdad y diversidad.
Desde 2005, el consistorio ha avanzado en accesibilidad, iniciando con la eliminación de barreras arquitectónicas. En 2007, se lanzó el Plan de Accesibilidad en Bibliotecas Públicas Municipales, implementando recursos como lupas y reproductores de CD; también se introdujeron intérpretes de lengua de signos.
A lo largo de los años, se han realizado importantes mejoras: en 2010, la biblioteca Ángel González incorporó señalética en Braille; en 2015, se realizó una consultoría sobre accesibilidad con la ayuda de PREDIF; y en 2016, se instalaron bucles magnéticos en toda la red de bibliotecas. En 2022, la biblioteca de San Fermín innovó con señalización tacto visual.
El presente es optimista. En 2023, la Dirección General de Bibliotecas recibió 250.000 euros del Foro de Empresas para mejoras en accesibilidad, como la subtitulación y signado de vídeos y adquisición de nuevos equipos tecnológicos.
El papel del personal es crucial. Marta Otero destaca la importancia de la formación continua en accesibilidad, vital para que los trabajadores puedan asistir adecuadamente a los usuarios.
Además, se realizan actividades inclusivas, como el Club de Lectura Fácil, en colaboración con entidades vinculadas a la discapacidad, fomentando la autonomía y participación de los usuarios.
Finalmente, el Primer Plan de Acción en bibliotecas, archivos y museos busca ampliar las actividades para personas con discapacidad y sensibilizar al personal. Lidia Teira, jefa del Servicio de Tecnología, apunta que el objetivo es seguir avanzando y aprendiendo para asegurar que la riqueza cultural esté al alcance de todas las personas.
Fuente: Diario.Madrid.es