La multinacional colombiana Dolmen ha iniciado una nueva etapa en su expansión europea con la apertura de su sede central en Lisboa, situada en la emblemática Avenida da Liberdade. Esta inauguración es un hito importante en la estrategia de la empresa, que busca consolidar su presencia en el continente. Con más de tres décadas de trayectoria y operaciones en países como China, Estados Unidos y varios de Latinoamérica, Dolmen apuesta por el mercado europeo con miras a liderar la modernización urbana sostenible.
La apertura de esta sede en Lisboa es parte de un ambicioso plan para desarrollar proyectos de alumbrado público y mobiliario urbano que cumplan con los objetivos de innovación y sostenibilidad promovidos por la Unión Europea. Eduardo Cortés Acuña, representante legal de Dolmen, destacó que la ubicación de la nueva sede permitirá a la compañía desempeñar un papel central en los esfuerzos por modernizar las ciudades de Portugal.
Con el establecimiento de oficinas adicionales en Oporto, Dolmen se posiciona como un centro de innovación en Europa. La empresa ya está trabajando en proyectos en Oporto, Almada y Coimbra, enfocados en soluciones que mejoren la eficiencia energética y el confort de los espacios urbanos.
La sostenibilidad ha sido fundamental para el crecimiento de Dolmen, respaldada por sus fábricas en China y la nueva instalación en Portugal. Sus iniciativas están diseñadas para crear entornos urbanos que sean tanto cómodos como eficientes, en sintonía con el plan Portugal 2030.
Además de su enfoque en la innovación, Dolmen ha sido reconocida por su entorno laboral, figurando en el Top 10 de Great Place to Work y siendo acreditada como empresa EFR por MASFAMILIA. Estos logros reflejan su compromiso con la inclusión y la responsabilidad social.
La compañía tiene previsto expandirse hacia Braga y Aveiro, reafirmando su liderazgo en soluciones urbanas sostenibles y su contribución a la visión de Portugal como líder en innovación. En su hoja de ruta también figura España, donde planea abrir una sede en Madrid para finales de 2026, mostrando un interés particular en la provincia de Alicante. Con estos movimientos, Dolmen refuerza su posición como aliado estratégico en la transformación urbana sostenible de Europa.