Con la llegada del verano y las vacaciones, mantener una alimentación saludable y una rutina de actividad física se vuelven cruciales para disfrutar al máximo de esta temporada. Según el Dr. Juan Antonio Arévalo, especialista en Aparato Digestivo del Hospital Quirónsalud Bizkaia, el sedentarismo es uno de los factores clave que afectan nuestra salud tanto en el presente como en el futuro.
El doctor Arévalo advierte contra la suplementación en omega-3, sugiriendo en su lugar el consumo de alimentos ricos en este ácido graso esencial, como el pescado azul, el salmón, el aguacate y las nueces. El especialista subraya la importancia de adherirse a una dieta mediterránea, que se compone principalmente de frutas, verduras y legumbres. “En esta dieta predominan las frutas, verduras y legumbres. Además, la alimentación debe ser sobre todo a base de productos ricos en omega-3”, destaca Arévalo.
Otro tema de preocupación son los excesos alimentarios. Según el doctor, estos son uno de los factores que más afectan al aparato digestivo. “No se debe abusar de azúcares refinados, grasas saturadas, alimentos fritos o rebozados”, detalla Arévalo. Añade que la combinación de una dieta equilibrada y ejercicio regular no solo mejora la condición física, sino que también reduce el riesgo de enfermedades crónicas, mejora el estado de ánimo y promueve un sueño reparador.
Arévalo también enfatiza la necesidad de equilibrar la vida social y la salud: “Se puede disfrutar de los amigos, de la comida y de una actividad física que nos llene, no necesariamente de alta intensidad. Pero la actividad física constituye parte fundamental de la salud digestiva”. Recomienda dejar tiempo para actividades físicas al aire libre y tener en cuenta la calidad de los alimentos que se consumen. “Comer inteligentemente consiste en consumir alimentos no excesivamente preparados como pescado o carne a la plancha, un poquito de marisco. No abusemos de una comida excesivamente elaborada y grasienta. Y, por supuesto, hacer un uso del alcohol con mucha moderación porque es un gran inductor de patologías y molestias digestivas”, aconseja.
En conclusión, el Dr. Arévalo recuerda la importancia de mantener una vida activa y una alimentación sana para el bienestar general, especialmente durante el verano.