La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, realizó una visita institucional a Extremadura con varios de sus consejeros, donde se abordaron temas de interés común para ambas regiones. En un encuentro que subraya la colaboración entre las comunidades autónomas, Díaz Ayuso y la presidenta de Extremadura, María Guardiola, firmaron un protocolo que busca mejorar la calidad de los servicios públicos y potenciar áreas de desarrollo económico, social y medioambiental.
Uno de los puntos neurálgicos del debate fue la conexión ferroviaria con el país vecino, Portugal. Díaz Ayuso criticó la falta de atención hacia Extremadura, que ha estado “aislada” a pesar de su lealtad con España. En sus palabras, es inadmisible que regiones claves se encuentren en tal situación, apelando a una mayor integración en infraestructuras de transporte.
El primer documento planteado en el encuentro insta al Gobierno central a derogar la actual ley estatal de Vivienda. Propone reformar el marco legal para ofrecer mayor seguridad a los propietarios, abordar la ocupación ilegal de viviendas y mejorar las condiciones para el alquiler seguro.
En vísperas del Consejo de Política Fiscal y Financiera, tanto Madrid como Extremadura exigen el mantenimiento de la independencia fiscal dentro del régimen común y solicitan la creación de un sistema de financiación autonómica consensuado que garantice el respeto a las normas comunes, evitando la fragmentación de la Agencia Tributaria.
El protocolo firmado tiene una vigencia de cuatro años y busca una prestación de servicios públicos de alta calidad, protección de los más vulnerables y enfrentarse a retos contemporáneos como la natalidad, el acceso a la vivienda y la lucha contra las drogas. Díaz Ayuso expresó el deseo de que este acuerdo sirva como ejemplo para el resto del país.
Un aspecto relevante es la apuesta conjunta por un modelo económico basado en la libertad empresarial, la seguridad jurídica y la reducción de la burocracia. Ambos gobiernos se comprometen a fomentar la financiación de pymes, impulsar la internacionalización y atraer talento.
La inmigración también fue tema de discusión, con un llamado al Gobierno nacional para evitar el uso de esta cuestión como moneda de cambio político. Abogan por una inmigración legal y vinculada al empleo, además de fortalecer los controles fronterizos en puertos y aeropuertos.
En el ámbito sanitario, se destacó la importancia de coordinar esfuerzos en todos los niveles asistenciales y compartir buenas prácticas. La Comunidad de Madrid, pionera en la atención a la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), ofrece sus recursos al sistema nacional, destacando la red de apoyo existente en el Hospital Enfermera Isabel Zendal.
Ambas comunidades destacaron, además, la necesidad de incrementar el número de profesionales sanitarios en España, un déficit que la pandemia ha exacerbado, y pidieron al gobierno nacional medidas para agilizar la homologación de títulos extranjeros.
El documento también pone énfasis en el cuidado de los grupos vulnerables, como dependientes, personas con discapacidad, víctimas de violencia de género y mayores. Se fomenta la colaboración interregional para mejorar la atención y compartir experiencias exitosas.
En cuanto al medio ambiente y la agricultura, Madrid y Extremadura se comprometieron a trabajar conjuntamente en la gestión de espacios naturales protegidos y a apoyar la caza y actividades tradicionales que favorecen el equilibrio de los ecosistemas. También se prevén iniciativas de investigación conjunta en bioeconomía agraria y simplificación administrativa en política agraria.
Esta serie de acuerdos refleja un compromiso mutuo para enfrentar desafíos comunes y avanzar en la prestación de servicios de calidad, el desarrollo económico, y la protección del entorno natural de manera colaborativa.
