En un acto cargado de simbolismo y expectativas de futuro, la Real Casa de Correos fue el epicentro de un importante convenio firmado entre la Comunidad de Madrid y la Prefectura de Aichi. El gobernador prefectural, Hideaki Ohmura, y la presidenta autonómica sellaron un acuerdo orientado a robustecer las relaciones institucionales, comerciales, culturales y de inversión, con un foco especial en industria, innovación y digitalización.
«Priorizamos la industria de alto valor añadido en sectores como la automoción, movilidad, logística o digitalización, donde Japón juega un papel muy relevante en el mundo», destacó la presidenta autonómica. Este convenio promete ser un catalizador para el asesoramiento tanto a empresas madrileñas interesadas en el mercado asiático como a las de origen japonés que buscan expandir su actividad en España.
La Prefectura de Aichi, que aloja la sede central de Toyota y otras multinacionales, aporta el 10% del Producto Interno Bruto (PIB) industrial de Japón. «Son muchos los retos que tenemos en común», señaló la presidenta, quien aprovechó la ocasión para enfatizar la posición geográfica estratégica de Madrid. «Somos un nexo de unión con la comunidad hispanoamericana, más de 600 millones de personas por todo el mundo, un continente fuente de riqueza y oportunidades», añadió.
El impacto de este convenio también se hace sentir en la inversión extranjera. Empresas de capital japonés, como NTT Data, ya tienen una sólida presencia en la región. La semana pasada, la Comunidad de Madrid firmó un acuerdo pionero con NTT Data para impulsar la inteligencia artificial en la mejora de servicios públicos. Este compromiso consolida una relación que se remonta a 1993, cuando comenzaran los registros de inversión extranjera. Desde entonces, Madrid ha recibido del país nipón 8.188 millones de euros, lo que representa el 75% del total nacional, muy por delante de Cataluña, la segunda comunidad autónoma en recepción de inversiones japonesas, con 1.830 millones de euros.
Este convenio no solo fortalece los lazos ya existentes, sino que también abre nuevas vías de colaboración y desarrollo, prometiendo un futuro de crecimiento conjunto y beneficios compartidos entre Madrid y Aichi.