La capital de España se vistió de gala con motivo de los Premios de Cultura, donde se congregaron tanto jóvenes talentos como figuras consagradas del arte, la música y el teatro. La jefa del Ejecutivo autonómico destacó el papel de Madrid como epicentro cultural del país, enfatizando su compromiso con una oferta artística «libre y plural», sin censura, abarcando sus 179 municipios.
En una ceremonia llena de emotividad, el Premio Nobel de Literatura, Mario Vargas Llosa, fue homenajeado a través de una lectura dramatizada a cargo de los actores Arturo Querejeta y Pepa Pedroche, quienes dieron vida a fragmentos de sus obras. Esta emotiva apertura marcó el inicio de una noche dedicada a reconocer la excelencia en diversas disciplinas artísticas.
El Dúo Dinámico fue galardonado en la categoría de Música Popular, un reconocimiento a su extensa trayectoria y a los icónicos temas que continúan resonando a través de las generaciones. Enrique García Asensio, destacado director de orquesta, recibió el premio en Música Clásica, subrayando su contribución a la continuidad de la excelencia sinfónica madrileña.
En el ámbito de la danza, Belén López fue premiada por su destacado trabajo en llevar el flamenco a audiencias internacionales, mientras que la veterana actriz Esperanza Roy recibió honores en teatro por su gran impacto en la escena madrileña.
El legado de Marisa Paredes fue celebrado con un premio póstumo en Artes Cinematográficas, en reconocimiento a su inigualable carrera tanto en el cine como en el teatro. Por su parte, el escritor Alfonso de Ussía fue distinguido en Literatura, celebrando su prolífica carrera literaria cargada de ironía y perspicacia.
Andrés Amorós recibió el galardón en Tauromaquia, mientras que el Teatro Circo Price fue reconocido en Artes Circenses por su singular propuesta y programación diversa.
En Artes Plásticas, Salvador Amaya destacó por su habilidad para revivir personajes históricos a través de sus esculturas, y Álvaro Herrero fue premiado en Fotografía por su impresionante captura de la vida subacuática, siendo nombrado Fotógrafo Subacuático del Año por una imagen en la Polinesia Francesa.
La tradición también tuvo su espacio con la Asociación de Belenistas de Madrid, premiada por su dedicación a las Artes Populares. En Patrimonio Histórico, el Hotel Palace fue distinguido tras una remodelación que preservó su esencia y reafirmó a la capital como un destino de excelencia.
Coincidiendo con el 50 aniversario de Zara, Inditex recibió el premio en Moda, celebrando su impacto económico y cultural. La Fundación Mapfre, con medio siglo de compromiso con la cultura, fue reconocida por su labor de mecenazgo.
Finalmente, la gastronomía madrileña brilló con el premio al restaurante Lhardy, un emblema de la cocina tradicional española desde 1839, destacando su icónico cocido y consomé. Con estos premios, Madrid no solo celebra su riqueza cultural, sino que reafirma su vocación como un escenario abierto al mundo.