El pasado Miércoles Santo en Alcalá de Henares se vivió una jornada de gran fervor y tradición con la multitudinaria Procesión de La Venerable Hermandad y Cofradía del Santísimo Cristo Atado a la Columna y María Santísima de Las Lágrimas y del Consuelo. A pesar de las previsiones de mal tiempo, el evento logró congregar a centenares de vecinos que se volcaron en las calles del centro de la ciudad para presenciar este destacado acto litúrgico.
La procesión, marcada por su carácter solemne y devoto, contó con la distinguida presencia de la alcaldesa Judith Piquet, además de varios concejales del Equipo de Gobierno, como Antonio Saldaña, Santiago Alonso, Lola López, Esther de Andrés y Antonio Peñalver. La ocasión fue una demostración de la profunda devoción que caracteriza a los habitantes de Alcalá de Henares, quienes desafiaron las inclemencias del tiempo para ser testigos de la tradicional Estación de Penitencia.
El recorrido comenzó con la espectacular salida en la calle de la Imagen, donde el público se congregó para observar el paso de ambas imágenes titulares. El Santísimo Cristo Atado a la Columna recibió el acompañamiento musical de la ‘Agrupación Musical de La Columna’, mientras que la ‘Banda Sinfónica de Juventudes Musicales’ puso el toque musical para el paso de la Virgen.
El evento no solo puso de manifiesto el fervor religioso de la población, sino que también resaltó la importancia cultural y social que estas celebraciones tienen para Alcalá de Henares. Una tradición que, año tras año, continúa atrayendo a residentes y visitantes, reforzando los lazos comunitarios y perpetuando el legado espiritual de la Semana Santa en la región.