El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, junto con la vicepresidenta Kamala Harris, han lanzado un contundente llamado a la población para que no se deje engañar por la desinformación en torno al huracán Milton, que se aproxima con una fuerza destructiva considerable. Biden subrayó la peligrosidad de esta tormenta e instó a la ciudadanía a buscar refugio seguro, al tiempo que calificó la desinformación propagada sobre la situación como «antiestadounidense». Según el líder demócrata, estas falacias no solo perjudican la respuesta del Gobierno sino que también ponen en peligro a aquellos que precisan ayuda urgente. En línea con este pensamiento, Harris condenó en una entrevista los intentos de difundir información ficticia sobre la gestión de la tormenta, destacando el carácter peligroso de engañar a las personas necesitadas.
En paralelo, algunos sectores del espectro republicano han intensificado sus críticas a la administración Biden-Harris, como lo muestra el expresidente Donald Trump, quien cuestionó sin pruebas la eficacia de la respuesta gubernamental. Acusaciones sin fundamento, como el desvío de fondos de la FEMA a migrantes, han sido refutadas por la agencia, que ha puesto en marcha una sección especial en su sitio web para desmentir rumores peligrosos. Varios congresistas republicanos, incluyendo a Chuck Edwards, han alzado la voz en contra de estas ficciones, subrayando la necesidad de actuar con responsabilidad ante situaciones de emergencia. Mientras tanto, la FEMA se ha mantenido firme en su postura de aclarar malentendidos sobre su operativo y asegurar a la población que la seguridad y ayuda a las personas afectadas son su máxima prioridad.
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