Una operación policial llevada a cabo en los distritos madrileños de Villaverde y Hortaleza ha desmantelado una red que gestionaba varios pisos patera, en los que se alojaban inmigrantes en condiciones de hacinamiento extremo. Las autoridades detectaron la operación tras recibir múltiples quejas de vecinos sobre el elevado número de personas que entraban y salían de ciertos pisos en los barrios afectados. Durante el operativo, se descubrió que los apartamentos, ubicados en edificios residenciales comunes, se habían adaptado con literas y divisiones improvisadas para alojar a un número de personas muy superior al permitido por las normativas locales de habitabilidad.
Los inquilinos, en su mayoría de origen latinoamericano y africano, vivían en condiciones insalubres y pagaban tarifas excesivas por espacios mínimos, lo que generaba beneficios significativos para los administradores de esta red ilícita. La Policía Nacional ha detenido a varios individuos presuntamente implicados en el negocio, sospechando que esta estructura podría estar vinculada a mafias de tráfico de personas que operan a nivel internacional. Las investigaciones continúan con el objetivo de desarticular completamente la organización y brindar asistencia a las víctimas, quienes ahora enfrentan un futuro incierto mientras las autoridades trabajan en su reubicación y posible regularización de su situación legal en el país.
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