Las temperaturas abrasadoras del verano en Texas han impulsado a un equipo de investigadores de la Universidad de Texas en Austin a desarrollar un innovador sensor portátil que promete revolucionar el monitoreo de la hidratación. Este dispositivo no invasivo permite medir en tiempo real cómo de hidratado está el cuerpo, utilizando una técnica conocida como bioimpedancia.
El sensor, detallado en la publicación de la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, funciona mediante la transmisión de una corriente eléctrica de baja intensidad a través de los tejidos del brazo. Los tejidos bien hidratados facilitan el paso de esta corriente, mientras que aquellos deshidratados ofrecen resistencia, haciendo posible determinar el estado de hidratación del usuario.
Nanshu Lu, profesora en la Escuela de Ingeniería Cockrell y líder del proyecto, comentó sobre la importancia de este avance: «La deshidratación es una amenaza silenciosa que afecta a millones diariamente. Nuestro sensor ofrece una forma sencilla y eficaz de monitorear este estado en tiempo real, permitiendo una acción preventiva».
El dispositivo interactúa con una aplicación móvil, transmitiendo datos continuamente. Esto permite un seguimiento discreto y constante, incluso durante actividades cotidianas. Las pruebas, que incluyeron el uso de diuréticos y un monitoreo de 24 horas, confirmaron que los cambios en la bioimpedancia se correlacionan con la pérdida de agua corporal.
Matija Jankovic, coautor y miembro del laboratorio de Lu, destacó la precisión del método: «Nuestros experimentos muestran una alta sensibilidad de la bioimpedancia a cambios de hidratación, alineándose bien con otros métodos de medición».
Este sensor podría superar a los métodos tradicionales, como análisis de orina o sangre, proporcionando una solución más práctica y menos invasiva. Su potencial va más allá del ámbito deportivo, incluyendo beneficios para profesionales expuestos a altas temperaturas y para el tratamiento de enfermedades relacionadas con la hidratación.
De cara al futuro, los investigadores planean establecer valores de referencia absolutos mediante el análisis de datos a gran escala. Además, exploran diseños innovadores como sensores tipo tatuaje o dispositivos que recojan el sudor, para aumentar comodidad y eficiencia.
«Esto es solo el comienzo», concluye Lu. «Nuestro objetivo es que cualquier persona pueda conocer su estado de hidratación de forma sencilla en cualquier momento».