Un ciudadano español ha arrojado luz sobre una realidad compleja y a menudo ignorada en las calles de su ciudad. Durante años, ha estado observando y documentando la vida de un grupo de personas que, al margen de la sociedad, sobreviven principalmente a través de robos y hurtos en la misma área donde habitan. Su acercamiento a esta problemática busca no solo evidenciar las dificultades que enfrentan, sino también llamar la atención sobre la falta de intervención efectiva por parte de las autoridades.
Mientras muchos pasan por alto la situación, este activista ha destacado cómo estas personas quedan atrapadas en un ciclo de delincuencia del cual les resulta complicado salir. La falta de oportunidades y apoyo se presenta como uno de los principales obstáculos, perpetuando una situación que parece no tener fin. Mediante su trabajo de campo y las historias recogidas, el español busca generar conciencia y promover un cambio en las políticas públicas que les ofrezca una vía de integración social y laboral.
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