Un incendio en una industria de almacenamiento de productos químicos en Vilanova i la Geltrú ha provocado una nube tóxica que obligó a confinar a los residentes en sus hogares durante la madrugada. La alerta, enviada por Protección Civil, ordenó a los vecinos de varias localidades cercanas cerrar puertas y ventanas. Juanjo Burgos, residente local, describió cómo la alarma llegó mientras dormía, acompañado por su familia. A pesar de la preocupación inicial, decidió volver a la cama tras observar la nube amarilla desde la ventana. Burgos, acostumbrado a trabajar en ambientes potencialmente peligrosos en el puerto de Barcelona, afirmó que las experiencias recientes, como la pandemia, le han acostumbrado a gestionar situaciones de emergencia con calma.
El propietario de CleanWater Pool, la empresa afectada, destacó la rapidez de respuesta de los bomberos, quienes lograron controlar el fuego antes de que se propagara a edificios adyacentes. Sin embargo, el incidente dejó en evidencia problemas de comunicación, ya que muchos residentes, especialmente en Calafell y Cunit, no recibieron la alerta debido a fallos en redes de telefonía. En Olivella, aunque no se vieron afectados directamente, los mensajes de preocupación circularon rápidamente entre los vecinos. La situación alteró significativamente la rutina local, suspendiendo actividades como encuentros deportivos, y dejando a los ciudadanos enfrentándose al olor penetrante de cloro mientras trataban de continuar con sus vidas diarias.
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