El veterano reportero madrileño, uno de los miembros fundadores de EL MUNDO, deja un legado imborrable en el ámbito del periodismo medioambiental. Su labor pionera en este campo convirtió a su trabajo en una referencia esencial para las generaciones venideras de periodistas en España, documentando con rigor y dedicación temas cruciales relacionados con el medio ambiente. Más allá de su trabajo escrito, se destacó como un excepcional fotógrafo, capturando momentos fundamentales de la Transición española. Estas imágenes no solo narraron una época de profundo cambio político y social, sino que también inmortalizaron la esencia de un país en transformación. Este compromiso tanto con la palabra escrita como con la imagen visual consolidaron su reputación como un reportero integral y visionario.
Sus colegas y contemporáneos lo recuerdan como «un compañero excepcional y un maestro», alguien que no solo compartió su expertise con generosidad, sino que inspiró a muchos en su profesión. Su legado en EL MUNDO es palpable, no solo por su contribución a la creación del prestigioso medio, sino también por haber sentado las bases de un tipo de periodismo que estaba, en ese entonces, en sus etapas incipientes. En un mundo cada vez más consciente de la importancia del medio ambiente, su temprana labor y visión son hoy más relevantes que nunca, subrayando su carácter adelantado a su tiempo y su impactante influencia en el periodismo español.
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